Ahora que llega el verano apetece consumir recetas frescas y ligeras, y por supuesto fáciles de hacer, porque no apetece demasiado andar pasando calor en la cocina. Un producto de temporada típicamente veraniego es la fruta, hay de todo tipo y color, de modo que os voy a proponer un plato muy sencillo que puede tomarse a cualquier hora: como merienda, desayuno o como postre y que proporcionará a tu mesa un toque de color, frescor y dulzura.
Además las frutas nos aportarán una gran cantidad de vitaminas.
Para contrastar el dulzor de la fruta, o para aquellos que sean menos golosos, he optado por macerarla en regaliz y lima. Lo remataremos con el sirope de violetas para darle un sabor más peculiar. Os dará la sensación de estar comiendo golosinas fresquitas.
Se puede macerar la fruta utilizando otras frutas, como, por ejemplo, naranja, mandarina o bien usando alguna otra especia, como la canela o incluso la pimienta.
- Ingredientes para cuatro personas
- 100 gr frambuesas
- 100 gr fresas
- 100 gr grosellas
- 300 gr melocotones
- 300 gr melón
- 50 gr nueces pecán
- 10 hojas de hierbabuena
- 1 lima
- Polvo de regaliz
- 50 gr Violetas
- Preparación:
Con el sacabolas se hacen bolitas de melón y lo echamos en un bol. El melocotón se lava se pela y se prepara en gajos para echarlo junto al melón. Se lava el resto de la fruta y se añaden todas junto con las hojas de hierbabuena. Sólo dejaremos fuera las frambuesas para evitar que se deshagan.
Por otro lado, se raya la cáscara de la lima, se exprime para extraer el zumo y se disuelve con el polvo de regaliz. Se añade todo al bol de fruta, se tapa con papel film y se mete en la nevera para que macere 24 horas.
A la vez preparamos las violetas en un cazo con un chorrito de agua y se pone al fuego para que se deshagan hasta que queden hechas una especie de sirope.
Cuando ya tenemos macerada la fruta y preparado el sirope de violetas, lo emplatamos para servir. Se colocan frutas maceradas en al plato, se agregan las frambuesas, unas hojas de hierbabuena, las nueces y se cubre con el sirope de violetas.
Una receta fácil, ligera, natural y muy colorida.